Voto x Voto, Casilla X Casilla, que pen… santes

Está mañana me levanto con la “excelente y magnifica” noticia que una de las avenidas más importantes de la ciudad así como el Centro Histórico, se encuentran cerrados a causa de un berrinche. Pero no es el arrebato de un niño de 5 años al cual su padre no le quiere comprar un juguete, es el berrinche de un político frustrado y enfermo de poder que no acepta la derrota.
Realmente, se me hace absurdo que tanta gente desinteresadamente apoye su temible causa, mis pocos años de experiencia me han dejado claro que en este país nadie hace nada gratuitamente. Así que no nos vengan a contar esa romántica historia de que la gente pide el recuento de los votos.
Por otro lado, todas las personas tienen derecho a manifestarse y expresarse, porque así lo marca nuestra Constitución, pero siempre y cuando no se afecte a terceros, y este no fue el caso. Cerrar la vía pública infringe la ley, pero eso ya no es noticia, el señor López Obrador es especialista en esos asuntos.
Hay que tener un poco de cerebro y sentido común para saber que ese tipo de circunstancias no son favorables para el país. Primero hay que dejarle claro que no todas las personas que lo apoyan son todo México, así que no diga que está tratando de defender mi dignidad, ya que yo no lo apoyo de ninguna manera. Segundo, se está afectando la economía de la nación, el Centro Histórico y Reforma forman parte de los lugares más visitados por los turistas. ¿Quién va a querer visitar calles cerradas y llenas de propaganda?
Ahora bien, su petición de “Voto x Voto, Casilla x Casilla” es de lo más absurdo, si no se hubieran contado las boletas una por una en cada casilla, no se conocerían los resultados. Es una burla para todas las personas que asistimos a emitir un voto, funcionarios de casillas y observadores, así mismo como el IFE decir que el pasado 2 de julio se cometió un fraude.
Desde mi punto de vista este no fue un “complot” más, sino la diferencia entre la lucidez y la ignorancia, porque dentro de todo existimos personas que no estamos enajenadas con la imagen de un político populista que compra a los ancianos con tarjetas para despensa, aun existimos gente que amamos a México y tenemos la esperanza de tener un país mejor donde todos los jóvenes y niños tengan un mejor porvenir.
Finalmente, invito al señor a usar ese órgano que se encuentra protegido por el cráneo, llamado cerebro, puede ser que no lo conozca. Por favor cuide sus palabras y póngase a reflexionar en la magnitud de las mismas, llamar a la resistencia civil no es un juego es el principio de las grandes catástrofes del mundo. Y le reitero nuevamente que los votos ya fueron contados uno por uno, así que acepte los resultados, porque no todos los mexicanos tenemos la culpa de que sea un enfermo de poder.