La noche es de las sublimes ilusiones,
de los dulces sueños y polvos de estrellas,
de la misteriosa luna y las hadas mágicas,
del corazón y del amor. Pero esta noche
fue nuestra, fue de nubes de algodón.
Entre dulces ratos y nubes de algodón,
compartimos nuestros recuerdos más
recurrentes. Miramos el jardín de los árboles
de chocolates, bebimos té de alegría,
refreso de diversión y café de amor.
Respiramos el aire de la felicidad,
vestimos ropa de la sinceridad y
miramos nuestras almas desnudas.
Vi tus ojos y descubrí esa belleza de ángel,
del ángel perfecto que espere.
Entre dulces ratos y nubes de algodón,
te lleve a vivir a uno de los departamentos
de mi corazón, te entregue la llave de
acceso a mis recuerdos y le pedí al cielo
que no me dejara despertar de este hermoso sueño.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario