Soy una hada de la luna, que padece
la locura, de pasión desorbitante,
de delirio inapelable, de deseo
incontrolable, que sufre el encanto
de un hechicero de la noche.
Estrellas de mi cielo, a ustedes
no les puedo mentir, ni ocultar lo
cautiva que se siente ésta luna
desquiciada, él es mi compañero
más añorado.
Ha robado el brillo de mis ojos,
el resplandor de mi sonrisa, en sus
manos tiene mi corazón que palpita
por poseer una de sus sonrisas.
Mi noche amada, protectora de las
almas presas del amor, ayúdame
a terminar con este embrujo del
corazón, a dejar de ser esclava
de sus ojos que robaron mi resplandor.
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